Capitulo Tres

Capitulo Tres

El mar en la cúpula.

Meses navegando

Tierra a la vista

Todo volverá a ser como fue…

Las luces en la costa

Son faros del pasado

Todo volverá a ser como fue…

Y cuando salto de cubierta

Y me abandono a la corriente…

Nuevas formas crecen

Son tan atractivas

Quiero descansar de todo ayer…

Y voy flotando por el río

Voy envuelto en la corriente…

Hombre al agua

Voces que se agitan…

Soda Stereo-Hombre al Agua.

E

l canto de los pájaros atravesaba la ventana, un murmullo conocido se escuchaba en el pasillo. Jazmine se levanto y se vistió con un vestido simple, color blanco sin muchos detalles. Anthony también se vistió y salió del pasillo hacia al baño, allí vio un montón de cerditos por toda la habitación, se metían por debajo de la puerta que daba al “living”. Anthony fue al baño y luego Jazmine se metió, el amiguito de Anthony estaba ya despierto como todas las mañanas y Jazmine no dudo en acariciarlo un rato antes de que salieran a reunirse de los demás.

Llegaron al living y todos estaban sentados con muchos cerditos rodeándolos. Las amigas de Jazmine estaban sentadas en un sofá, los hermanos Rojo estaban en otro y Frank se babeaba sin disimular por Alisson con su corto vestido/pijama rosa casi transparente, tenia ropa interior blanca, y aunque no estaba muy dotada aún así le gustaba; Peggy llevaba un vestido/pijama color negro, hasta unos diez centímetros arriba de las rodillas, dejaba marcar sus curvas y se veía bonita.

Anthony y Jazmine se sentaron en un sofá para una sola persona y se abrazaron escuchando como todos planeaban las cosas. Dijeron algo sobre un mar, y que habían averiguado que abría tormenta esta noche, pero que solo duraría un rato. En el medio de la mesa había una miniatura de barco antiguo tallado en madera, había mapas en pergaminos, una brújula antigua, un catalejo dorado.

-Anthony, debemos hacer un viaje a través del mar… Estamos seguros de que será algo nuevo para ti, pero deberás acostumbrarte-Bonnie hizo una pausa y volvió a hablar-Como ya sabes nosotros no somos humanos, pero no podemos adelantarte mucho, es complicado de entender sin aunque sea mínimas bases para que entiendas las cosas. Debemos volver a nuestro mundo, hay algunos de nuestra especie que vienen frecuentemente al mundo humano, otros, como Peggy y Alisson, viven aquí, trabajan aquí, etc.; personas como Frank y yo que vivimos en una parte donde solo algunos humanos pueden llegar. Personas como Jazmine vienen aquí cuando su instinto se los dice.

>>Hay varios portales en el mundo humano que se conectan con nuestro mundo, pero para activarlos se necesita del conocimiento de uno de los nuestros, varias técnicas de aprendizaje, claro que si un humano lograra hacerlo necesitaría objetos sumamente necesarios, ya que llegar a la civilización de nuestro mundo deben cruzar por una “aventura”.

-Necesito que se pongan  esto-dijo Frank sacando unos vestidos hasta las rodillas de con tres capas, la parte del cuello era grande, quedando los hombros al descubierto y un corsé de cuero. Eran cuatro vestidos de diferentes colores, uno era blanco con corsé color castaño, otro era rosa viejo con corsé color crema, uno de color gris con corsé negro y uno rojo con corsé negro.

Bonnie tomó el de color rojo, Alisson el rosa, Peggy el gris y Jazmine el blanco. Se fueron a cambiar cada una a su cuarto y Anthony acompaño a Jazmine, se veía preciosa con ese vestido blanco y delicado, la ayudo a ponerse el corsé y acaricio su cabello lentamente abrazándola por su espalda y besando su cuello.

Se oyó un golpeteo en la puerta y la voz de Bonnie:

-Anthony, tengo la ropa para ti, ¿Pueden abrir?

Anthony fue hacia la puerta y Jazmine se sentó en la cama, Bonnie le paso un paquete de cuero atado con toscas cuerdas y le dio en las manos unas botas negras de cuero bien brillantes; Anthony se sentó junto a Jazmine y abrió el paquete, dentro había una camisa suave pero fina, era de color blanco, un chaleco de cuero marrón y unos pantalones marrones también. Se vistió también mientras Jazmine lo ayudo, hacían una hermosa pareja.

Salieron al pasillo y Bonnie les indico que debían ir a esa oficina antigua. Entraron y todo se iluminaba por el enorme vitral, las partículas de polvo jugaban en el aire con los rayos del sol. Bonnie con el vestido puesto y unas largas botas de cuero golpeo el techo y de este se abrió una escalera que daba a algo alto, Primero subió Bonnie, luego Peggy, Alisson y detrás fue Frank que seguía babeándose por la chica. Jazmine subió con Anthony detrás sonriendo y cuidando que Frank estuviera lejos para que no pudiera ver sus pechos desde arriba.

Estaban en el cuarto circular que habían visto cuando el edificio estaba a los lejos, arriba se veía una gran cúpula de cristal finamente tallada, en el suelo se veía un gran círculo de color blanco con dibujos tallados, en el medio había un altar tallado en piedra, colocaron los bolsos dentro del circulo y luego ellos entraron. Bonnie con el barco de madera en la mano comenzó a hablar en  una lengua que Anthony no conocía, todos cerraron los ojos y Jazmine tomo la mano de su novio incitándolo a cerrar sus ojos también, Bonnie siguió hablando colocando en el  altar el pequeño barco.

A continuación se escucharon que el sonido de agua turbulenta invadía sus oídos, seguido de rayos y gotas de lluvia que caían sobre ellos. Anthony abrió los ojos y vio como todos ya los tenían abiertos, Jazmine lo veía sonriendo y lo beso abrazándolo por su cuello mientras todos iban hacia la parte bajo techo.

Se quedaron bajo la lluvia besándose mientras el barco se sacudía por las olas del mar, luego de un rato bajo la lluvia entraron y Bonnie los digirió a su camarote. El lugar estaba ordenado y llevaba el mismo estilo que los cuartos en la gran biblioteca. Estaban mojados así que tomaron unas “toallas” y comenzaron a secarse se quitaron la ropa mojada y volvieron a sacarse, los pechos de Jazmine estaban erizados y los pezones duros, Anthony se acerco a ella también desnudo y la abrazó por su cintura, besando su cuello y acariciando su abdomen, ella se estiro con una sonrisa y tomo la mano de Anthony bajándola hacia su entrepierna, la acaricio despacio sonriendo y luego se escucho un golpe en la puerta, era Bonnie.

-Necesito que vengan arriba espero no molestar.

-No Bonnie, no molestes-dijeron Anthony y Jazmine al mismo tiempo seguido de una risita.

Anthony dio vuelta a Jazmine abrazándola y besándola apasionadamente, caminaban lentamente hacia la cama, Anthony hizo que ella quedara acostada boca arriba y siguió besándola,  abrió sus piernas y ella dejo de besarlo para soltar una risita, el miembro de Anthony ya estaba duro y soltaba gotas de pre que mancharon la cama, sujeto fuerte con sus manos las piernas de Jazmine y la penetro rápido muchas veces gimiendo los dos despacio. Anthony salió de ella excitado y busco sus bóxers y luego poniéndose los pantalones. Sonrió a Jazmine mientras se ponía otro vestido blanco y simple y luego la ayudo a colocarse su corsé. Se puso su camisa y Jazmine lo ayudo a ponerse el chaleco de cuero cariñosamente. Salieron por la puerta y caminaron hasta las escaleras y subieron, el cielo estaba ya sin ninguna nube y repleto de estrellas, Anthony miro a lo lejos el mar, y en su agua totalmente cristalina se reflejaban las estrellas. Anthony se acerco a los bordes del barco y miro hacia abajo, el agua estaba repleta de peces en colores anaranjados, amarillos rojos y blancos, todos en colores muy brillantes pero que no molestaban a la vista, tenían manchas en negro que los hacían lucir increíbles, los tamaños variaban desde treinta metros a milímetros, lo increíble era que el agua era totalmente transparente, se podía ver el fondo del mar a miles de metros con bastante claridad para ser de noche, deseaba que el sol saliera para admirar ese increíble mar. El viento soplaba tranquilo y Anthony abrazó a Jazmine mirando el cielo, descubrió que en el cielo había tres lunas, una grande y dos a su alrededor, una parecía de hielo, otra era de roca y la tercera era extraña, como de cristal, las tres en tonos azules.

Nadie durmió esa noche, tanto Anthony como los demás disfrutaron del hermoso paisaje, para Anthony todo eso era nuevo, y totalmente increíble y aunque para Bonnie, Frank, Jazmine Alisson y Peggy esto era normal, parecía que lo disfrutaban.

***

A la mañana siguiente seguían su rumbo a tierra, el barco se dirigía solo, y cuando el sol estuvo alto, ese mar fue algo totalmente maravilloso. Se podía ver todo bajo el agua, había tiburones también, serpientes marinas, diferentes estilos de peces aunque parecía que los de la  noche se ocultaban durante el día. Había tortugas, ballenas y en el fondo, ahora que el mar no era tan profundo como en el lugar en donde habían aparecido, se divisaban corales de hermoso colores.

El viaje siguió en su rumbo y Anthony seguía apoyado en las barandas talladas en madera del barco, a lo lejos logro ver unas figuras extrañas, que solo había odio en cuentos de fantasía, y aquellas historias que su padre solía contarle, siguió mirando y las figuras se acercaban a gran velocidad, cuando estuvieron junto al barco dieron un gran salto, hermosas sirenas de colas escamadas en tonos azules y plateados bailaban frente a sus ojos, tenían los ojos y el pelo azul, y su piel era demasiado pálida, estaban rodeadas de delfines que jugaban con ellas. Eran amigables, y estuvieron jugando con Anthony, salpicándole agua y trayéndoles caparazones de caracoles vacios, luego llego Jazmine que también jugó con ellas. Se unieron Alisson y Peggy, hasta que poco a poco los peces de alrededor se alejaron, luego las sirenas asustadas se fueron de repente junto con los delfines, el agua se ponía negra y tres manchas rojas se veían en el fondo de las sombras del agua, y se iban acercando, Bonnie se alejo y coloco sus manos en una forma que parecía que sostenía un arco y desde el sol comenzaron a caer burbujas hacia las manos de la chica y estos se unieron formando un arco de oro junto con una flecha, todo tallado delicadamente, Frank siguió a su hermana y apuntaron a las manchas de los lados, dispararon y las manchas rojas se borraron, muertas. La mancha roja de en medio  dio un fuerte salto y cayó sobre Anthony, estaba mojada, y era una sirena de ojos totalmente negros, sin partes blancas, de piel gris, parecía piel muerta, tenia musgo en algunas partes, su boca estaba llena de dientes parecidos a los de un tiburón, su cola era como la de una sirena muerta, ya que se notaban sus huesos y la piel que quedaba estaba negra, su melena roja color sangre tenia mas musgo y algas, y sus garras estaban sucias de sangre seca. Intento morder a Anthony pero Jazmine la empujo con una patada, la bestia enfurecida salto sobre Jazmine olvidándose por completo de Anthony, este, asustado, tomo a la sirena por sus hombros y en sus manos quedaron restos de piel muerta, la sirena estaba comenzando a morder a Jazmine y Anthony estaba en shock, desesperado, su mente reacciono al fin, dándole un golpe con el puño cerrado en la espalda de la sirena, soltó un grito repugnante escupiendo agua y de repente se congelo. Anthony estaba sorprendido, creyó que era algo normal, y cuando aparto su puño del cuerpo congelado, este se deshizo en partículas de un brillo extraño que cayeron sobre el cuerpo de Jazmine, esta tenía marcas de una mordida que podría haber sido letal en su cuello. Anthony abrazo fuerte a Jazmine; Peggy, Alisson y Bonnie se quedaron viendo sorprendidas mientras Frank vigilaba a los lados del barco. Jazmine se sentó abrazándolo y cerró sus ojos, los peces volvían a su lugar y una sirena común salto viendo a Jazmine, Frank la apunto con el arco amansándola, pero con una voz seca se escucho decir:

-Tranquilo… no te are daño… solo quiero ayudar…

La sirena salto cayendo junto a Jazmine y se acomodo acariciando la herida en su cuello con su húmeda mano y poco a poco esta se fue cerrando. Jazmine le sonrió.

-Gracias… jamás había visto una de esas sirenas…

-Son una especie que apareció cuando el rey callo, supongo que no has ido por mar en mucho tiempo ¿no?

-No-sonrió-fue hace años, de pequeña…

-Pero conoces los de la tierra, bosques y selvas ¿verdad?

-Si… si los conozco-Jazmine se acerco a Anthony y lo abrazo.

-Si no les molesta, ¿podrían traerme agua? No puedo saltar si no estoy mojada y si llegase a caer así me lastimaría el contacto con el mar.

-Sí, no hay problema-dijo Anthony yendo hacia uno de los baldes con cuerdas que había en algunos lugares de la baranda del barco. Lo bajó para luego subirlo con agua y fue hacia la sirena, le mojo su cabello, luego su pecho y después su cola que tomo un brillo delicado. Anthony sonrió a Jazmine y dio la vuelta para devolver el balde a su lugar. Dio la vuelta para volver con los demás que hablaban con la sirena y se desmayo.

***

Anthony abrió los ojos despacio y vio como la luna se veía a través del ventanal de su casa, disfruto de la vista luego de unos segundos y empezó a recordar a su novia. Se desespero, no sabía que había pasado con ella, y ¿el mar cristalino? ¿Había sido solo un sueño? Comenzó a llorar, golpeando sus piernas, se levanto y recorrió toda la casa, sus padres estaban parados en el pasillo, con las mejillas sumidas y ojeras, esto definitivamente era un sueño pensó…

-No… por favor…. Despiértate Anthony ¡despiértate!-Comenzó a gritarse a sí mismo y vio como el lobo negro se paraba junto a él mirándolo con una sonrisa, no podía despertar, y aunque sabía que no era real no quería sufrir otra vez así, había superado lo de sus padres y ahora esto… Lloro más y el lobo comenzó a caminar lentamente hacia su madre, la mujer estaba inmóvil y el lobo la volteo al suelo. Mordió su cuello, luego arranco uno de sus brazos y comenzó a comerlo, luego el otro, una pierna y le ofreció la otra a Anthony, el chico se asusto y se hizo hacia atrás y el lobo fue hacia la pierna:

-Que lastima que no quieras comer, esta delicioso…-mastico la pierna frente a la cara de Anthony y luego volvió a terminar de comer a la madre.

Se acercó a su padre y su padre grito:

-¡Anthony despierta!-se asusto y el lobo comenzó a masticar su brazo-te quiero hijo…

Y despertó.

Las tres lunas se veían por el ojo de buey del barco, Jazmine estaba a su lado, con un trapo mojado en agua fría que había estado en su frente. Llevaba el vestido sin el corsé y al ver que despertaba lo miro triste.

-Anthony… amor tienes mucha fiebre… Moon nos dijo que debió ser esa horrible sirena…

-¿Quién es Moon?

-Es la sirena que me curo-Jazmine se acostó junto a Anthony y este adolorido la abrazo llorando.

-Amor… soñé con el lobo otra vez-la abrazo muy fuerte, se sentía débil y Jazmine susurro una bonita canción de cuna intentando calmarlo. 

Entro Bonnie con un vestido de dormir y se sentó en la cama.

-¿Esta mejor?

-Sí, la fiebre bajo pero tuvo pesadillas…

-Pobre Anthony…

-Solo quiero que mejore…-lo abrazo fuerte y lo beso-Bonnie ve a dormir, yo me encargo de cuidarlo, si necesito ayuda te llamo.

Jazmine tomo la pokeball de Anthony cuidadosamente y pensó en el Arcanine de este, el Arcanine salió un poco confundido y vio a Anthony en la cama dormida y se acostó a su lado y lo lamio lentamente haciendo que la fiebre desapareciera por completo. Anthony durmió en medio de Jazmine y Arcanine que lo cuidaron toda la noche.

A la mañana siguiente Anthony se sentía bastante feliz. Salieron fuera y el barco seguía su rumbo. Todos estaban en el mar, y sus pokemons estaban allí afuera, Alisson tenía un Milotic, Dragonair, Luvdisc y un Corsola, todos eran hembras. Peggy tenía un Kingra hembra y un Walrein, Sharpedo y Mantine machos. Bonnie tenía un Goldeen y un Seaking hembras, un Octillery y un Krokodile machos.

Frank tenía un Kingler y un Craudant machos, y un Dwebble y Carvanha hembras.

Anthony se acerco a las barandas a ver como los pokemons jugaban y aparecieron los de Jazmine: Fereligatr, Golduck, Quagsire, Surskit y un Dewgong todos eran machos menos este ultimo. Anthony feliz vio como Jazmine le sonreirá y le dijo:

-Vamos saca a tus pokemons, les encantara, es el mejor mar que los pokemons podrán sentir en su vida-siguió sonriendo y Anthony saco su pokeball y uno a uno sus pokemons fueron saliendo: Kingler, Whiscash, Sharpedo, Spheal, Poliwag, Gyarados, Blastoise todos machos; luego las hembras: una joven Latias y Lapras y un Gorebyss.

Sus pokemons fueron al agua y jugaron allí, Jazmine se sentó en las barandas del barco y Anthony la abrazo por su cintura mirando el mar.

-No sabía que tenías tantos pokemons Anthony-se apoyo en él y sonrió- eres increíble, se ven bien cuidados.

-Bueno… desde el accidente de mí padre yo solo me dedique a mis pokemons, y bueno tengo demasiados y recuerdo cada uno, a todos los quiero por igual, siempre fueron lo único que me quedaron.

Ella lo abrazo fuerte y lo miro con una sonrisa:

-Deberíamos ir… ¿tú qué crees?-sonrió y volvieron a su cuarto y Jazmine se puso una bikini color negro que hacía que su piel blanca se sintiera mucho mas blanca.  Anthony la beso mientras se desvestía quedando en bóxers, subieron hasta la parte alta y Jazmine se sentó en la baranda otra vez, estaba todo el mar tranquilo y ella saltó soltando un grito y una risa hasta que se hundió y luego volvió a salir llamando a Anthony con su mano.

Anthony se apoyo en las barandas y salto abrazando sus piernas que se enrollaban apegándose a su pecho y callo, el agua era liviana y cristalina, bajó con los ojos abiertos y todo se veía perfecto, raramente el agua no le hizo daño a sus ojos, estuvo debajo hasta que no aguanto la respiración y luego salió relamiéndose al ver a Jazmine. Increíblemente el agua no era salada, tomó un poco y seguía sin saber salada.

-Jazmine… esta agua no es salada…

-Claro que no, en realidad es un río pero se le llama mar por su extenso tamaño, es único en cualquier mundo, tuvimos suerte de que la mansión estuviera cerca, esa cúpula es uno de los pocos lugares de donde su puede llegar aquí.

-Es… increíble…-nado un poco y Jazmine comenzó a bucear y con los pokemons de Anthony también se metió bajo el agua y aguanto la respiración siguiendo a Jazmine, quería abrazarla y besarla bajo el agua, y comenzó a quedarse sin aire, intento salir pero la superficie estaba más arriba de lo que parecía, intento llamar a sus pokemons pero él no pudo hacerlo.

Su Sharpedo se dio cuenta más tarde y fue rápido hacia él, pero era tarde y Anthony inhaló… En sus pulmones el agua se metió, volviéndose aire y permitiéndolo respirar, se asusto y abrazo a su Sharpedo y salió a la superficie respirando aire.

Jazmine salió fuera y luego Frank que comenzó a reírse de él. La novia de Anthony mando a su Fereligatr a atacar el joven y luego ella fue con Anthony, lo abrazo y se rio tiernamente.

-Sabes este mar tiene otra cosa increíble el agua que entra a tus pulmones se convierte en aire permitiéndote bucear todo lo que quieras.

Pasaron el día en el agua hasta que oscureció y todos guardaron sus pokemons, salieron del agua con ayuda de sus pokemons y volvieron a sus cuartos, Jazmine se fue a bañar y Anthony saco sus bóxers y sin que ella se diera cuenta se metió en la ducha, (Parte Roja) se bañaron juntos y luego fueron a la cama desnudos, durmieron abrazados tiernamente y a la mañana siguiente se vistieron de nuevo. Jazmine llevaba ahora un vestido blanco con tonos en miel, tenía otro chaleco de cuero pero seguía siendo del mismo color. Salieron fuera cuando Anthony termino de vestirse y salieron fuera, era de mañana, el sol había estado saliendo y se veía un bonito resplandor dorado y aves volando, los peces seguían nadando y Anthony volvió a sacar de sus pokemons para que se despidieran de ese rio, ya que se aproximaban a tierra, a lo lejos se veía una no tan grande isla con un bosque, montañas y más atrás esta se agrandaba demasiado formando tal vez un gran continente.

En las tierras no se divisaban animales, solo los pocos peces y corales que se acercaban, había algunas antorchas apagadas y luego unas grandes nubes negras sobre el lugar que una gran montaña acariciaba. Las horas pasaron y el barco tocó la arena, todos bajaron y Anthony guardó sus pokemons, bajaron a la costa con unas palabras de Bonnie el barco se volvió otra vez esa pequeña figura de madera, ella llevaba un bolso cruzado de cuero color marrón y se adentraron en el bosque, llegaron a un claro y Bonnie saco un carbón de su bolso, y comenzó a dibujar en el suelo unos símbolos. Terminándolos y de su bolsa saco lo que parecía otra miniatura de madera pero de una casona, comenzó a decir otra vez las extrañas palabras dejando en el medio y esta comenzó a crecer hasta volverse una verdadera casa. Bonnie entro y les dijo a los otros que entraran, que estaba todo bien.

Primero entro Jazmine y luego Anthony, seguido de Peggy y Alisson y por último el baboso de Frank.

Había una gran sala con tres sofás, una chimenea, seis puertas al otro lado y una escalera que daba arriba, entraron cada uno a una puerta y allí estaban los cofres con ropa, unos bolsos y el resto de la habitación eran iguales a las habitaciones que había en la biblioteca. Luego de eso Anthony subió a ver que había tras las escaleras, y allí había un escritorio, y varias cosas como las que había en aquel lugar que parecía de un científico, la única diferencia es que aquí había otras cosas que en el mundo humano no.

Todos se reunieron en la sala y Bonnie comenzó a hablar:

-Bueno… se que tu Anthony no tenias a nadie en el mundo humano, todo lo que tienes lo traes contigo… ¿verdad?

-Claro… lo único que me falta son los libros que escribió mi padre, esos si me hubiera gustado traer, pero luego no tengo casi nada en el mundo humano…

-Perfecto, hay una razón por que vinimos aquí, y tienes que saberlo, mi instinto me dijo que debía venir y le hice caso, pero al segundo día me entere de lo que pasará en el mundo humano…

Se escucho como flechas intentaban atravesar el escudo que había puesto Bonnie alrededor de la casa. Salieron fuera y vieron como una especie de mapaches con plumas en la cabeza apuntaban sus arcos hacia ellos, eran unos animales un tanto humanizados, grises blancos y negros, de ojos marrones y plumas negras tras sus orejas, sus arcos eran toscos, en madera con las puntas afiladas en lo que parecía de plata. Pero lo más extraño era en lo que montaban. Unos esqueléticos perros robóticos, en colores plateados con combinaciones de colores (rojo y plateado; azul y plateado; verde y plateado; amarillo y plateado; etc.) sus ojos eran del mismo color que los detalles de sus cuerpos, tenían patas largas y un cuerpo flacucho y se movían de forma muy animal aunque escalofriante.

Bonnie saco de un bolsillo una esfera de acero y la presiono en su palma haciendo que esta se derritiera cayendo en el piso y yendo hacia un punto hasta formarse una especie de perro parado en dos patas, muy flaco y con detalles rojos en su cuerpo al igual que los otros perros, este aúllo y los demás perros se quedaron quietos, los mapaches cerraron sus ojos agachando sus cabezas y aun sobre los perros hicieron una reverencia.

Anthony se maravillo de ese gran lobo extraño y lo miro sorprendido, el escudo se abrió dejando entrar al mapache con un perro bastante grande y hablo.

-Lo siento Srta. Bonnie, no sabía que era usted.

-¿Por qué tanta agresión Kaýz?

-Anda un perro no muy grande con propiedades muy parecidas a las suyas. Tememos que sea un intruso y tenemos la orden de atacar sin piedad a menos que su sangre huela a tu raza.

-¿Y por qué nos atacaste? Somos nativos de este planeta, olemos a nuestra raza, Kaýz.

-Huele a humano, yo creo que alguien se infiltro con ustedes…

-No, él es el humano-acerco a Anthony hacia el frente y se lo mostro como si fuera un objeto-él es novio de Jazmine, su nombre es Anthony y es importante que sobreviva. Nosotros buscaremos al perro del que hablas. Solo necesito saber su raza y buscar dividiendo olores.

Anthony se sentía incomodo, además ¿a qué se refería con que debía sobrevivir? ¿Qué estaba pasando en el mundo humano? ¿Y por que era tan importante matar a un simple perro con olor a humano?

Bonnie estuvo platicando un rato junto a Frank y el extraño mapache al que llamaban Kaýz, Jazmine le sonrió a Anthony y le susurro a su oído bromeando

-Olor a humano…- fue hacia el bosque con una sonrisa y Anthony la siguió.

-Jazz ¿no crees que esto puede ser peligroso?

-Tu sígueme-ella le sonrió y corrieron perdiéndose entre las miradas de los demás.

Llegaron a lo que parecía un arroyo color negro. Jazmine sonrió y comenzó a arrojar piedras a él, todo se lo tragaba.

A lo lejos se oyó un sonido canino y Anthony corrió hacia Jazmine abrazándola por su espalda y agachándose intentando protegerla, sintió que debía temer pues ese sonido movió su instinto. Cerró los ojos y sintió todo alrededor, sintió por primera vez el miedo que comenzaba a sentir Jazmine, sintió la caminata lenta del perro hacia ellos y luego un salto que cruzo el arroyo, abrió los ojos sin dejar de abrazar a Jazmine y miro a un lado, allí parado a su lado había un perro mediano, de pelo largo y ondulado, sus orejas tenían muchos mechones de pelos ondulados y en su pecho tenía una mancha a modo de corbata. Sus ojos eran marrones y mostraban un toque humano, Jazmine sentía el olor a humano y extrañamente Anthony lo sintió también.

El perro se acerco a ellos y susurro en sus mentes sin mover sus labios.

-No teman… No les are daño…

Anthony dejo a Jazmine detrás y él se puso delante sacando a su Arcanine y se acerco al perro.

Este asustado miro al Arcanine y puso el rabo entre las piernas, indicándole al gran perro que no buscaba pelea, pero el amigo de Anthony siguió con su cola levantada al igual que sus orejas a modo de alerta.

El perro cerró los ojos envolviéndose en una nube de humo y este comenzó a esfumarse luego de unos minutos y allí se veía una silueta de un hombre humano, Anthony saco a su Rhyperior e hizo que se llevara a Jazmine un tanto lejos y la protegiera, este lo hizo y la protegió con su cuerpo, el humo seguía desapareciendo y la figura se volvió visible. Un chico de unos 20 años, de pelo negro con pocas ondas, de pelo largo llegando un poco más del cuello, algunas manchas blancas en su pelo cada tanto, ojos marrones, rostro un poco anguloso, un poco más alto que Anthony, vestido de traje negro, con una corbata blanca de forma prolija, llevaba zapatos de cuero blanco y guantes blancos en sus manos, su traje en la parte de atrás era más largo a modo de cola y dio un par de silbidos, Arcanine se puso frente Anthony soltando unos gruñidos y este hablo

-No se preocupes, necesito a mis fieles compañeros, pero necesito que confíen en mí, les contare quien soy solo si no temen de mí.

Tres grifos se acercaron planeando y aterrizaron junto al joven, uno era más grande, de plumas blancas y una cresta de plumas delicadas en su frente, daba aspecto de ser suave y tenía los ojos azules. Otro era de color negro y de ojos rojos, la piel era tosca y tenía algunas cicatrices. El tercero era color tostado parecía una hembra y era delicada, de plumas más suaves que el grifo blanco, tenía también una cresta tostada y tenía los ojos verdes.

-Mi nombre es Eliot, soy un hijo del rey…-Jazmine se dio vuelta y lo miro sus ojos y su rostro anguloso eran los mismos que el del viejo rey.

Jazmine tomo una piedra del suelo y esta se volvió plateada con toques celestes, y luego un precioso  Latios salió, este se acerco al llamado Eliot y lo rodeo con un aura rosa, el Latios, conforme, se acerco a Jazmine y se desvaneció sonriéndole y asintiendo con su cabeza.

-Si tienes la sangre de los Zerohmes… Pero al parecer tienes mitad de sangre humana.

-Bueno ¿confían en mí ahora?

-Si confiamos en ti, es necesario que te llevemos con los demás y los mapaches para que nos expliques.

El Rhyperior seguía al chico con sus grifos vigilándolos. Jazmine y Anthony iban hablando, de la mano.

Llegaron con los demás y los mapaches se alertaron, pero Anthony se interpuso, haciendo que nadie diera un flechazo.

Y Jazmine hablo:

-Esperen, el es hijo del rey Athelstan… No tiene por qué hacerle daño…

Los mapaches dejaron caer sus arcos y Bonnie junto con su lobo se acercaron a él, el lobo lo tomo por sus brazos colocándolos detrás de su espalda y lo metieron a la casa, haciéndolo subir al laboratorio. Anthony los siguió y detrás iba Jazmine.

Dentro del laboratorio, los cuatro jóvenes y el perro robótico.

-¡Como puedes hacerte llamar hijo del rey, humano!

-Bonnie créele, huele su sangre pruébalo, míralo…-suplico Jazmine.

-Por favor Bonnie no lo trates así, hasta yo pude olerlo-menciono Anthony.

-Puedo hacer una prueba, pero te costara la vida si resultas ser un mentiroso-Bonnie fue al escritorio y saco una daga dorada de gemas transparentes-esta daga fue creada por el gran rey Athelstan, aquel que…-y el joven respondió.

-Aquel cuya sangre sea la misma que la del rey no será lastimado por esta daga.

-Exacto-Bonnie se acerco a Eliot y coloco la daga en su cuello e hizo tanta presión que Jazmine se escondió en el pecho de Anthony mirando aun, y este la abrazo sin apartar la mirada.

La daga no atravesó su cuello, si no que se desvaneció, y cuando Bonnie aparto el arma blanca esta volvió a su forma original.

-Si eres… hijo del rey… Pero… el solo tuvo tres hijos… una chica y dos chico… ¿Quién eres tú?

-Yo… soy un bastardo… mitad sangre de Athelstan, mitad sangre de una humana…

-Nunca lo supe…

-Ni yo-suspiro Jazmine.

-Les contare todo si dejan de maltratarme-contesto Eliot.

Bajaron y Bonnie confirmo que Eliot tenia “sangre azul” se sentaron en el patio frente la casa junto con el líder de los mapaches, Bonnie oculto su gran perro y se sentó aun con un toque de desconfianza.

-Bueno, mi padre conoció a una mujer hace 24 años, tuvieron una relación de un año hasta que ella quedo embarazada. Mi madre conocía las verdades del planeta Zerohmena. Huyo sin decirle nada a Athelstan, temiendo que los habitantes de aquí la odiaran, ya que la relación con la mujer de Athelstan era muy buena.

>>A mis 16 años comencé a practicar con mis transformaciones, ya que un humano no tiene autorización para entrar a menos que el rey le otorgue un permiso y una forma segura de llegar. Descubrí que al igual que uno de los hijos del rey que podía transformarse en perro podía salir y entrar sin permiso de su padre. Así que practique y logre transformarme en este perro negro que hoy vieron. Y así es como llego aquí todo el tiempo.

>>Conocí a Taylor en mi primer viaje, entre por ese arroyo negro y el estaba sentado en unas rocas. Me regalo tres huevos y de ellos salieron esos tres grifos que aprecio tanto.

-Taylor…-Jazmine abrazo a Anthony cerrando sus ojos con un tono de tristeza.

-Lo siento Jazmine…-dijo Eliot mirándola con tristeza. -bueno… vine aquí hace unos 3 días cuando algo extraño comenzó a suceder en la Tierra. Y aquí me encuentro, he estado ocultándome de los mapaches y de todo lo que ha pasado.

Jazmine salió a caminar y Anthony la siguió, se veía triste, y se sintió celoso y mal a la vez, supuso que Taylor era su antiguo novio y con el tono en que Eliot hablo él había muerto.

-Jazz… dime ¿qué te pasa?… no me gusta que estés mal…

-Anthony… abrázame…-Anthony se sentó junto a ella que estaba junto a un tronco y la rodeo con su brazo apoyándola en su pecho, ella lloro lentamente y cerro sus ojos.

Anthony no soporto verla y se enojo más con aquel llamado Taylor.

-¿Jazmine porque lloras así? ¿Quién es Taylor?

-Taylor es mi hermano Anthony…

Anthony la abrazo más fuerte y se sintió pésimo por ponerse celoso de su hermano…

-Jazz… ¿eres una princesa?

-Si Anthony… me están buscando y quieren matarme, el lobo me busca soy su siguiente presa, mato a Taylor…

Anthony la abrazo muy fuerte y suspiro sin saber que decir, querían matar a su novia y acababa de enterarse de que pertenecía a la realeza.

-Jazz… no sé qué decirte… me siento poco para ti-suspiro y se apego a ella abrazándola más fuerte-Vamos a la casa ¿sí?- se levanto y la abrazo caminando lentamente.

Entraron a la casa, Alisson estaba en el patio, hablando una Lopunny hembra que llevaba una cinta rosa en el cuello.

-Bonnie y Frank se fueron con los mapaches a no sé que, no estaba escuchando-soltó una risa y siguió murmullando con su Pokémon.

-Ven Jazz vamos adentro-abrazo a su novia y camino abriendo la puerta y la dejo pasar primero.

En el living estaban Peggy y Eliot hablando y se callaron cuando los vieron entrar.

Entraron a su cuarto y sentó a Jazmine en la cama y el tomo sus manos y le sonrió:

-Parece que tu amiga se lleva bien con Eliot-se sentó a su lado abrazándola y dándole besos en su mejilla.

-Si-sonrió-tienes razón, creo que harían una bonita pareja-siguió sonriendo y giro su cabeza dándose pequeños besos y sonriendo Anthony comenzó a quitarle el corsé a Jazmine y esta se estiro sonriéndole mientras desprendía los botones de su camisa, Anthony tomo delicadamente el vestido de Jazmine y lo saco lentamente mientras besaba su cuello y acariciaba sus hombros.

-Jazz dime si quieres que me detenga… no sé si estés muy bien y no quiero incomodarte…

Ella le sonrió y lo abrazo apoyando sus suaves pechos en su pecho.

-Anthony… jamás me incomodarías… no pienses eso…-le siguió sonriendo y en cada pausa daba un pequeño beso en sus labios.

-Eres tan linda Jazmine…-comenzó a besar su cuello y termino de deslizar el vestido de su novia dejándolo caer a sus pies, ella se estiraba sonrojándose y soltando pequeños gemidos al sentir sus labios su lengua y sus dientes en su cuello.

Jazmine logro controlarse un poco y tomo a Anthony de su mentón basándolo y acariciando el bulto que se formaba en su entrepierna, él la tomo de su cintura mientras ella se esforzaba por quitarle los pantalones aunque él se resistiera.

-¿Por qué tan impaciente amor?-Anthony soltó una risita y se puso de forma que le diera la espalda a su novia y se quito los pantalones seguido de sus ajustados bóxers-¿Vienes Jazz?-se metió en la cama cubriendo su entrepierna con las suaves sabanas formando una montaña en donde se encontraba su bulto.

-Por su puesto amor-le sonrió y se sentó sobre el abdomen de Anthony, arqueo su cuerpo y comenzó a besarlo, y acariciar su entrepierna con la textura de las sabanas.

Las ventanas estaban abiertas y una brisa de aire entro haciendo que la piel de Jazmine se erizara y soltara una risita.

-¿Cerramos las ventanas, hermosa?-comentó Anthony acariciando su cuello con su boca y su nariz.

-Claro que no hermoso…-le dio unos besos en su boca y le sonrió-es más divertido si algún animal nos espía-soltó una risita y se metió bajo las sabanas con el cubriéndose hasta el cuello.

Anthony tomó su cintura mientras le besaba el cuello y ella frotaba su entrepierna en su abdomen. Jazmine se hizo un poco hacia atrás mientras Anthony acariciaba sus caderas y el miembro de su novio le tocaba en medio de sus nalgas.

-¿Eso es para mí, Anthony?-soltó una risita y se puso en cuatro sobre el besando su cuello y estirándose.

-Mm si…-se estiro y tomo a Jazmine de sus caderas y moviéndola despacio la acerco a su pene y ella se dejo mover lentamente hasta que sintió la punta del pene de Anthony acariciar su entrepierna húmeda. Los dos estaban mojados y Anthony comenzó a bajar lentamente a Jazmine y su miembro se deslizo despacio dentro de la vagina de Jazmine ya húmeda. Anthony tomaba fuerte a Jazmine de sus caderas, y Jazmine lo ayudaba dando fuertes movimientos, haciendo que el miembro de su novio se metiera hasta la base.

Estuvieron un rato haciéndolo lento y fuerte basándose mientras Jazmine lo acariciaba tierna y excitantemente, besaba su cuello y sus labios, metía su lengua durante los besos dentro de la boca de él y viceversa. Más tarde la excitación aumente al igual que la velocidad, Jazmine dejo de soltar esos gemidos de lujuria para comenzar a soltar fuertes gritos, agitándose y Anthony la acompañaba, tenia sujetas fuerte sus nalgas y hacia que se penetrara muy profundo y rápido, mojándola por completo, sumado lo mojada que estaba la vagina de Jazmine, estaba llena y por el movimiento todo comenzaba a caer hacia la entrepierna de Anthony, empapándolos todos.

Los dos estaban sudando, a punto de llegar al orgasmo, la melena de Jazmine estaba totalmente desarreglada, toda revuelta, al igual que el cabello negro de Anthony que su novia había manoseado en esos momentos de máxima lujuria.

Comenzó a escuchar los gemidos de Jazmine, esos gemidos que le decían inconscientemente <<no te aguantes, estoy por llegar, lléname…>>. Así que sujeto bien a Jazmine de sus nalgas, marcándole sus manos y dejándolas rosadas por el contacto, levanto a su novia y la hizo bajar acompañada un duro movimiento hacia arriba de su cadera, su pene ya hinchado comenzó a sacar un largo chorro de semen caliente, seguido de los escandalosos gemidos de Jazmine al llegar a su orgasmo, y así siguió, con cada chorro de semen que soltaba hasta que solo salían gotas. Jazmine quedo tirada sobre el pecho de Anthony, jadeando y muy sudada, su novio la acariciaba contento, arreglando su cabello y poniéndolo a un lado, comenzó a acariciar su cuello delicadamente mientras bajaba por su columna siguiendo el movimiento que se formaba al estar arqueada, hasta que llego al final y la abrazo por su cintura, con su otra mano la tomó de su mentón y la beso dulcemente.

-Jazz… eres tan linda-le sonrió y la abrazo mucho mas fuerte apegándola a su pecho.

Ella se sonrojo y se apego a él acariciando su pecho.

-Sabes estás muy sudada, tal vez necesites un poco de aire…

-¿Te parece, Anthony? ¿Vamos a la ventana?-soltó una risita y la brisa suave y fría seguía entrando por la ventana, ella se apoyo dando la espalda al aire y Anthony la beso mientras tomaban fresco.

Pasaron unos minutos allí y luego Anthony cargo a Jazmine juguetonamente en sus brazos llevándola a la cama, cerro las ventanas y el aire fresco quedo dando vueltas en la habitación manteniéndola a una agradable temperatura. Fue hacia la cama y abrazó fuerte a su novia y se quedaron hablando entre sonrisas y besos hasta que se quedaron dormidos.

A la mañana siguiente Jazmine despertó, todo estaba tranquilo y se escuchaban voces conocidas en el patio, Jazmine se vistió y despertó a Anthony con un dulce beso en sus labios, este despertó y la abrazo, se vistió con la ayuda de su novia y bajaron fuera acompañado de su Arcanine que salió de su pokeball. Alisson estaba sentada junto a su Lopunny tomando una taza de té, Peggy y Eliot caminaban por ahí sonriéndose y hablando. Al parecer Frank y Bonnie seguían durmiendo ya que habían llegado al amanecer.

Nada raro paso, Anthony y Jazmine salieron a caminar, en el camino Anthony vio extraños insectos que parecían robóticos.

-Jazz… ¿qué es esto?-Anthony tomo entre sus manos lo que parecía un Libélula hecha en delicadas partes de un metal liviano y plateado.

-Eso es una libélula Anthony…-lo miro confundida y le dio un pequeño beso.

-No me mires así… donde yo vivo las libélulas no son de metal…

-Lo sé, solo te molestaba-le sonrió y lo abrazo por su cintura-aquí hay especies robóticas, pero no son armados por nadie, se crean a sí mismo como cualquier animal que haya en tu planeta y en el mío.

-Interesante…-abrazo a Jazmine dejando que la libélula volara lejos y beso a su novia lentamente hasta que se detuvo y la miro con una sonrisa-¿te parece bien que volvamos?

-Me parece bien, amor-le sonrió y lo tomó de su mano caminando de regreso por un camino inexistente.

Llegaron y Bonnie estaba hablando con Eliot, Peggy y Alisson, cuando los vio llegar les pidió que entraran. Se metieron a la casa y Bonnie y Frank se sentaron en un mismo sofá, el que estaba en el medio, Peggy y Eliot fueron al del lado izquierdo, Jazmine y Anthony al del lado derecho y Alisson se sentó con su Lopunny en el sofá opuesto al de los Hermanos Rojo.

-Anthony… no te hemos dicho por que estas aquí, aunque parece no importarte es necesario que lo sepas.

-Algo malo pasara en la tierra, por eso vinimos de improvisto aquí, para “protegerte”-hablo ahora Frank y su última palabra tuvo un toque de sarcasmo.

-Gracias Frank, pero no me interrumpas-dijo Bonnie enojada con su hermano y raspo su garganta para continuar hablando-Anthony, es importante que sigas vivo, nuestro instinto, y el amor de Jazmine, nos lo dicen. No queremos que nada te pase y te trajimos aquí, claro, hay muchas especies y cosas que podrían hacerte daño, pero hemos visto cosas de ti que nos hacen creer que tal vez las criaturas no te hagan daño, en cambio en la Tierra eres solo uno más, aquí estas a salvo-hizo una pausa-perdón si no te consultamos, mi instinto no estaba tan seguro de cuando pasaría, pero sabíamos que pasaría y te trajimos aquí sin preguntarte si querías salvar a alguien…

>>lo lamento Anthony no fue mi intención, si algo perdiste puedes pedírmelo, si a alguien perdiste solo me iré.

Luego de un largo silencio Anthony hablo.

-No, Bonnie, gracias… no tengo a nadie a quien salvar, solo me hubiera gustado traer mis cosas… supongo que ya están perdidas…

-Perdón por mi atrevimiento Anthony pero…-Bonnie fue hacia su cuarto y saco de ahí su bolso trayéndolo consigo y saco una cosa envuelta en un pañuelo de seda y se lo entrego a Anthony-ábrelo…

Anthony tomo el objeto y lo desenvolvió lentamente, allí había una réplica de su casa en detalles finos de madera, haciendo que fuera completamente una copia.

-Cuando fueron a buscar a las amigas de Jazmine me encargue de ir a tu casa lo más rápido posible, sin importar las miradas de otros… me metí a tu casa y salude a tus vecinos diciendo que era una prima tuya… Me preguntaron cómo estabas y les dije que en unos meses saldrías, ya con una historia armada entre a la casa con una llave creada por mi magia y limpiamos y ordenamos todo, antes de ir al encuentro de ustedes cuatro hice una copia exacta de tu casa y tus cosas por si algo le pasara.

-Gracias…-Anthony se apoyo en Jazmine y cerró sus ojos.

-Tranquilo, todo está bien-lo abrazo fuerte y le sonrió-continúa Bonnie-comentó Jazmine abrazando mas fuerte a Anthony.

-Bueno, necesitamos que alguien vaya al mundo humano, ¿Eliot puedes ir tú?

-Claro, mi forma perro no me matara, ya que soy mitad humano.

-Yo voy-saltó Peggy y todos la miraron sorprendidas-quiero ir con Eliot…

-Entonces yo también voy amiga-salto Alisson y Peggy se enojo.

-Siempre y cuando estén de acuerdo los tres.

Peggy se levanto y comento que iría a preparar algunas cosas, Alisson se sentó junto a Eliot y comenzó a hablar de diversas cosas que a nadie le importaban.

Jazmine fue tras su amiga, y Anthony se quedo en la puerta esperando, pero Jazmine lo tomo de su mano y lo metió al cuarto cerrando la puerta de un golpe.

-Peggy…-Jazmine se sentó junto a ella y abrazo fuerte a su amiga.

-¡¿Por qué siempre Alisson me hace esto?!-abrazó fuerte a Jazmine y lloro en su hombro, Anthony se sentía incomodo y se sentó junto a su novia y le acaricio la espalda intentando animarla a ella, ya que sintió como se ponía triste por su amiga.

-Tranquila Pegg ya sabes cómo es Alisson… ya se le pasara, tranquila.

-No se le pasara-siguió llorando-la odio tanto… toda su vida ha hecho lo mismo… La adío…-se apoyo en su amiga y continúo llorando.

-Peggy… perdón que me meta… pero…-Anthony comenzó a hablar y luego se cayó.

-Sigue Anthony-le sonrió Jazmine y Peggy esbozo una triste sonrisa.

-Bueno… ella parece más una humana común… ¿por qué no la mandamos solo a ella? Es de su raza y no le afectara algo que a los humanos si…

-Es una buena idea, Anthony-Peggy abrazo fuerte a su amiga con una sonrisa.

-¿Enserio le pedirían a Bonnie por mí?-siguió sonriendo y llorando a la vez.

-Si quieres voy a decirle, Peggy

-Por favor dile… inventa algo, y puedes llamarme Pegg-sonrió amistosamente y se apego a su amiga un poco más feliz.

Anthony salió fuera del cuarto, Alisson seguía coqueteando con Eliot que poca atención le prestaba, Bonnie estaba haciendo un mapa junto con unos escritos en un pergamino y Frank no se encontraba en la sala. Anthony se sentó junto a la chica pelirroja y comenzó a hablar:

-Bonnie… Pegg se siente muy mal y bueno se ha hecho amiga de Eliot y quería saber si solo iba Alisson al mundo humano, que Eliot se quede aquí…

-Habría que preguntarle a Eliot si quiere quedarse…

Eliot seguía escuchando y se acerco dejando colgada a Alisson.

-¿Peggy se siente mal? ¿Qué le paso?

-Está en su habitación, si quieres puedes ir…

-Anthony escuche la propuesta, yo me quedare si se siente mal, manden a Alisson.

Alisson se quedo enojada y se metió a su cuarto dando un fuerte golpe a la puerta y Eliot se metió al cuarto y la miro:

-Peggy…

Jazmine le dio una palmada en la espalda a su amiga y se fue con Anthony fuera devolviéndole una amable sonrisa a Eliot.

-Eliot… no… no quiero hablar…

-¿No quieres hablar o no quieres hablar conmigo?

-No se… -comenzó a llorar y abrazo fuerte sus piernas.

-Pegg…-se sentó junto a ella y se abrazaron fuerte- ¿te pusiste celosa?-sonrió un poco y la siguió mirando.

-Yo… Alisson jamás me deja ser feliz… todo lo bueno que consigo me lo quita…

-Tranquila Pegg…-la abrazo mucho y acaricio sus mejillas quitando sus lagrimas-sabes… tu me gustas… y también me enoje cuando Alisson menciono lo de venir con nosotros, quería estar a solas contigo…

-Eliot…

Se quedaron juntos hasta que Alisson partió, todos fueron a despedirse menos Eliot y Peggy, Jazmine y Anthony habían acordado con Frank y Bonnie quedarse fuera de la casa para no incomodarse, Bonnie y Frank habían salido a investigar tierras mas allá ya que había pasado un tiempo desde que no visitaban estos lugares. Volvieron todos en la noche, Eliot y Peggy estaban en la cama abrazados y ella se apoyaba en su pecho.

-Me gustas mucho Eliot…-lo abrazo fuerte y se sonrojo.

Había pasado todo el día y todavía ella no se había animado a besarlo, y él no quería incomodarla así que tampoco lo hizo.

Eliot se levanto diciendo que debía irse a dormir al cuarto de Frank, ella se levanto y lo sujeto de su mano, se dio vuelta y la miro.

-Eliot…-se abrazaron muy fuerte y ella acerco sus labios a los de él, cerraron los ojos al mismo tiempo y unieron sus labios basándose lentamente. El tiempo se detuvo para ellos y sintieron que ese beso se volvía eterno.

Luego de un momento Peggy dejo el beso y se dio vuelta sentándose en su cama confundida.

-Vete… perdóname, no me pude controlar, solo vete…

-No Peggy-Eliot se acerco y la abrazo por detrás y de su cintura apegándola a su pecho-me gustas mucho Peggy… 

-No, no me mientas… lo dices porque estoy mal…

Eliot acaricio su cabello negro y la abrazo más fuerte. Peggy se estiro hasta darse la vuelta y cerro sus ojos apoyándose en su pecho.

-Te amo Eliot… y tal vez parezca estúpido por que hace no mucho nos conocemos… pero hay algo en ti que es distinto y me atrae…

-Me tienes ganas Pegg-bromeo Eliot y la tomo de su mentón basándola, ella no se resistió y apego su cuerpo al del chico.

Él acariciaba su cintura lentamente mientras ella lo tomaba de su cuello sin dejar de besarlo, Peggy ya había tenido algo mas con otros chicos, pero a diferencia de Alisson ella seguía siendo virgen, cada chico con el que estuvo por hacerlo porque sentía afecto Alisson se lo había quitado, y ahora no estaba allí… aunque sintió miedo, no sabía qué hacer y Eliot era mucho más grande que ella.

Peggy comenzó a acariciar el pecho de Eliot y él la apego más tomándola de su cintura y acariciándola, bajando lentamente hacia sus nalgas y acariciándola despacio. Peggy se sobresalto y dejo el beso sonrojándose y quedando sobre el pecho de él, se sonrojo demasiado al ver que el quitaba sus manos y la abrazaba por su espalda, se sentía una niña.

-Oh Peggy lo siento… Creí que tu…

-Yo si quiero… pero jamás ha pasado…

-No quiero incomodarte, ¿quieres que me vaya?

-No… no quiero… en serio quiero hacerlo contigo Eliot…

El joven la tomó por sus nalgas de nuevo y ella sonrió un tanto sonrojada mientras seguía acariciándole el pecho.

-Pegg…-la beso lentamente mientras apretaba sus nalgas con sus manos acariciándola y la apego a su pecho, sintió los pechos resaltar por el corsé, sentía como acariciaban su pecho, no eran muy grandes pero bajo la tela suave de ese vestido se sentían lindos, Eliot termino el beso dulcemente y la miro con una sonrisa mientras desprendió su corsé por detrás, ella intentando tomar confianza y quitando sus nervios comenzó a besar el cuello de Eliot, este se estiraba sonrojándose hasta que termino de sacar su corsé tomo las mangas bajas del vestido y comenzó a deslizarlo por el cuerpo de Peggy, dejando ver sus pechos blancos, su piel estaba erizada y su pezones duros, ella se sonrojo y se acurruco en su pecho como una niña asustada; a Eliot esto le causo ternura y la abrazó con una sonrisa mirando sus ojitos, y su pene creció por completo al ver esa mirada lujuriosa que pedía todo, pero a la vez una mirada de curiosidad y temor.

-Peggy si no quieres hacerlo dime… de verdad no quiero incomodarte, se nota que tienes miedo…

-Pero quiero hacerlo… Por favor…

-Claro Pegg, pero no te asustes de mí, no te are daño, trata de sentir y disfrutar, no te asustes porque sea algo nuevo…

-Claro que no Eliot-la chica se acostó boca arriba, en la cama y el joven termino de sacar su vestido, no llevaba ropa interior y su vagina estaba desnuda, no tenía ni un solo pelito que la cubriera e hizo que Eliot sintiera que lo estaba haciendo con una niña; alejo esos pensamientos y se puso sobre ella con cuidado pero sin apoyarse para no hacerle peso y comenzó a besarla lentamente y bajar por su cuello, el seguía con ropa y pensó que tal vez sería un poco injusto.

Se quito el incomoda saco y luego desprendió los botones de la camisa, uno a uno dejando descubierto su pecho, Peggy lo miraba y su rostro se puso rojo, se excito bastante al ver el pecho marcado(?) de Eliot, no tenía nada de pelo en el pecho. Saco su cinturón y dejo más suelto sus pantalones que su pene manejaba desde dentro haciendo que una montaña se formara y se puso sobre Peggy nuevamente.

Siguió besando su cuello y bajando por su pecho hasta llegar a uno de sus pezones, lo acaricio con sus labios lentamente y luego lo metió en su boca mientras lo lamia.

Peggy soltó algunos gemidos y Eliot dejo de hacerlo y apretó su otro pecho mientras seguía bajando por su abdomen hasta llegar a su entrepierna, pero se detuvo de nuevo.

-Aun no Pegg… primero tengo que mostrarte el mío… Supongo que no es justo para ti, ¿Qué te parece?

-Me encetaría Eliot…

Peggy estaba agitándose y sentía que su vagina se mojaba más y más, Eliot se arrodillo sentándose a su lado y ella se arrodillo también como una niña curiosa, Eliot desprendía lentamente el botón de su pantalón para hacer desear a Peggy, en sus ojos se veía toda esa excitación acumulada que temía demostrar.

Eliot dejo bajar sus pantalones despacio y unos bóxers rojos cubrían un enorme bulto. Peggy apoyo su mano en él y sintió lo caliente que estaba, lentamente comenzó a bajárselos y dejo salir el miembro de Eliot, era bastante grande, no tanto, tal vez unos 18 centímetros y bastante ancho, tenía la punta mojada y Peggy lo tomo con su mano y lo masturbo despacio.

-Peggy creo que necesitamos condones…

La chica fue hasta uno de los cajones yendo en cuatro sin ninguna intención mala, pero Eliot no lo tomo así, poniéndose en cuatro también y se puso sobre ella y movió su cadera dejando la punta de su miembro entre sus nalgas.

Peggy se sonrojo y abrió despacio el cajón de una mesita de noche que había junto a la cama y saco una caja de condones.

-Pervertida…-Eliot pasó sus manos por su cintura y bajaron hasta su vagina y la masturbo despacio.

-Hey no… yo no… estos cajones…-Eliot siguió masturbándola mientras besaba su espalda tiernamente.

-Lo se lo sé, solo te estoy molestando preciosa.

Eliot se bajo de ella y saco un condón colocándoselo en su miembro cuidadosamente.

Peggy se puso boca arriba en la cama y abrió las piernas despacio dejando ver su vagina húmeda suave y virgen…

Eliot se sonrojo y se puso sobre ella besando su cuello y colocando su pene sobre su clítoris, acaricio lentamente ahí y luego hablo

-¿Estas lista, Pegg?

-Si…-Eliot dio una fuerte embestida dentro de la chica y esta soltó un gran y largo gemido de dolor y el chico acaricio su cabello para que se sintiera a gusto, sacó su pene y lo volvió a meter, esta vez el gemido de Peggy no transmitía tanto dolor, ya comenzaba a sentirse a gusto, y Eliot siguió penetrándola lentamente y dándole besos en el cuello, acariciando su cabello y tomándola de una pierna la penetro un poco más rápido.

Peggy no daba más de placer, era una sensación agradable para ella.

Eliot siguió haciéndolo hasta que ella llego a su orgasmo, sintió diferente a cuando lo hacía sola, fue agradable, pero Eliot no había acabado todavía. Peggy quito el condón y lo masturbo despacio sonrojándose hasta que hizo acabar a su amigo. Todo el semen había quedado en el pecho de Peggy y Eliot la llevo hasta el baño cargándola en sus brazos.

Se bañaron juntos y de forma tierna, Eliot llevo a la cama a Peggy y durmieron juntos esa noche. Peggy permaneció como una bebe toda la noche entre los brazos de Eliot.